Acabo de poseer este bellísimo cuadro pintado por Cesc Ginesta en el 2008.
Me hechizó desde que lo ví.
Cuando era niña y leía cuentos de hadas pasaba por sitios así, habitaba en sitios así y aún ahora, muchas veces me baño con hadas en lugares de ensueño como éste, después a las hadas les digo adios y me voy a mi vida cotidiana con un baño de magia que me ayuda a vivir .
La belleza de esas cascadas , la bella galería formada por tupidos muros naturales de ramas arbóreas, desembocando en aquel etéreo y dorado bosque donde habitan elfos y hadas., duendes y dragones......esa belleza la transmite este cuadro, así cuando no la encuentre en mi imaginación, la contemplaré, tal cual Cesc Ginesta la plasmó un día cuando surgió en su imaginación.
Las hadas son necesarias en nuestras vidas!lo cotidiano nos aplasta, nos desgasta y nos hace infelices. Cuando vas por los bosques del norte de España, a veces subiendo montañas, te ves inmerso en mil verdes,mil olores a hojas diferentes, una quietud indescriptible , sólo el rumor del agüa i algún petirrojo cantando y al final un verde más claro, mágico, como si fueras a entrar en un mundo de hadas, al que estás deseando entrar y eso este cuadro lo plasma totalmente, no es un reflejo de la realidad, es una síntesis de una impresión que muchos hemos tenido recorriendo paisajes así